Por: Lam. Héctor Chávez Álvarez
Mucho hemos escuchado en días pasados, sobre la iniciativa que surgió en Pachuca, Hidalgo; en la cual se pretendía, prohibir la entrada a menores de edad a corridas de toros y palenques de pelea de gallos.
Esta ocurrencia, salió de un legislador del Partido Acción Nacional del Estado de Hidalgo, junto con una “organización”, que además de prohibir la entrada a dichos espectáculos a los menores, pretendían colocar una leyenda, sobre los boletos de corridas de toros y peleas de gallos, que explicara que dichos eventos, son nocivos para la salud de los menores, afectando su bienestar, tanto mental como emocional, incitándolos al odio, al salvajismo y a no ser “personas de bien”.
Esta iniciativa fue rechazada por votación, el día 20 de agosto del presente año, contando con 5 votos a favor, 11 en contra y 6 abstenciones.
Estas iniciativas, que no tienen otro fin más que político por ser populistas, han sido presentadas en varios Municipios y Estados de la República Mexicana, como en Quintana Roo, Yucatán, Guanajuato, Estado de México, Hidalgo e incluso en nuestro Aguascalientes, pero no ha tenido éxito en ninguno de estos Estado, pues solamente en Guerrero, Sonora y Coahuila, están prohibidas las corridas de toros, mientras que hace algunos años, en el 2014 para ser preciso, en León, Guanajuato; pasó una iniciativa que prohibió la entrada a menores de 14 años de edad, siendo totalmente molesto, tanto para los mismos menores, que por su propio gusto acudían a las corridas de feria y más molestos, los padres que acudían en familia y eran rechazados, al momento de querer ingresar con sus menores, hijos o familiares.
En ese caso en específico, se presentó un amparo, donde se pedía la libertad de decisión de los menores y sus tutores, debido a que era también contra su libertad, el prohibir la entrada a dichos espectáculos. El amparo procedió y fue así, como en el año 2018, los integrantes de la Comisión de Gobierno, Seguridad Pública y Tránsito, aprobaron reformar el Reglamento de Espectáculos y Festejos Públicos para el Municipio de León, Guanajuato; eliminando la prohibición, para que los menores asistan a las corridas de toros y gallos.
Todas las iniciativas, que van encaminadas a la prohibición de la entrada a los menores de edad, sustentan que dichos espectáculos, propician la delincuencia, los problemas psicológicos y emocionales de los menores, mismos fundamentos, que no están basados en estudios científicos.
Es claro que la fiesta brava, tiene un tinte en el que se juega la vida un ser humano, contra un animal salvaje, pero la tauromaquia, va más allá del acto de matar o morir.
La tauromaquia, lleva también valores que se inculcan a los niños y jóvenes, como lo son el respeto hacia el toro, el respeto hacia sus compañeros, amigos y mayores. En la fiesta brava se inculca el deporte, la perseverancia, el profesionalismo y la responsabilidad, no hay más que acudir a una clase de los niños y jóvenes, en las academias taurinas, para ver con que disciplina se forman.
Algo que a mí siempre me ha sorprendido es la calidez y educación de los niños y niñas taurinos, se refieren hacia los mayores que ellos, con un respeto y con un vocabulario, que da gusto estar escucharlos. He tenido la fortuna de convivir con muchos niños y niñas de la Academia Taurina Municipal de Aguascalientes, con jóvenes becerristas y novilleros; es realmente satisfactorio, ver que aprenden además del arte de la tauromaquia, a comportarse y vivir sanamente.
Por otro lado, también está la libertad de los mismos niños y jóvenes, de decidir si acuden o no, a dichos eventos; en mi caso, siempre respeto la decisión de mi hijo cuando no decide asistir y me da gusto y emoción, cuando el menor me acompaña y está atento de todo lo que pasa en el ruedo y la plaza, porque dicho sea de paso, los taurinos somos una gran familia, es raro ver una pelea o un conflicto en una plaza de toros, como sucede muy a menudo en otros eventos deportivos.
Yo invito a todos a acudir a una corrida de toros y de ahí decidir, si te gusta o no, pero también los invito a respetar el gusto y la pasión de los taurinos.