Por: Lic. Rodrigo Temoc Villagrán
Resulta controversial las cifras que da el INE sobre los mensajes cortos que dan en la radio y televisión los partidos políticos, candidatos independientes y autoridades electorales, siendo una sobresaturación de información para el electorado. Pudiendo crear confusión, hartazgo y a la vez poca credibilidad para las partes que ejercen su voto en la jornada electoral, ya que la información proporcionada en medios puede ser poco digerible para un público que no se le ha capacitado de manera idónea o que un porcentaje considerable de la población, tiene poco interés sobre la vida política de nuestro país o de quienes nos gobiernan.
Debemos entender que nos encontramos en un mercado de nuevos votantes, y que los jóvenes no son apáticos, ya que con diversos acontecimientos que se han suscitado en México, es gente proactiva que se llega a comprometer seriamente con el país y la sociedad.
Sin embargo, el fomentar interés en la política a dichos sectores de la sociedad, es algo que las instituciones y autoridades en materia electoral les ha costado canalizar y regular de forma adecuada y con apego a la normatividad. Es así, como las autoridades han cometido errores en los canales y estrategias de la comunicación.
¿Cuáles son los cuatro errores en la comunicación política digital que se realizan en México?
Se están utilizando los canales equivocados: Ha cambiado el entorno del consumo de los medios de comunicación en aproximadamente cinco años, donde los medios tradicionales continúan bajando año con año, tales como la radio y la televisión.
Que, por otro lado, tenemos el uso de internet que ha tenido un crecimiento considerable en el país, de acuerdo a una encuesta dada a conocer por la ENDUTIH1, en el país existen 71 millones de usuarios de internet, que equivale al 60% de la población total, y que el grupo de usuarios que va de los 18 a los 34 años es el que tiene mayor acceso con el 85%de la población.
Es ahí donde deben intervenir y analizar las autoridades en materia electoral, qué tipo de trabajos deben implementar para estar al alcance de aquel sector social innovador en el uso del internet, donde entiendan el tema y no les genere confusión o poca credibilidad.
Una comunicación sin sentido: A veces, la comunicación que emplean las autoridades llega a ser muy institucional y la vez compleja. Es decir, tratan de utilizar un lenguaje muy técnico y jurídico, siendo aburrido y con poca comprensión.
Por lo que, de acuerdo un nuevo mecanismo que emplean los órganos jurisdiccionales en materia electoral, se está utilizando un lenguaje incluyente y ciudadano que pueda llegar a ser comprendido por toda la ciudadanía para que conozca las controversias que se dan en dicho campo del derecho y que solución se les da.
Miedo al uso de las redes sociales: Las redes sociales son un arma de doble filo, ya que se encuentran poco reguladas en la normatividad, siendo un terreno en el que las autoridades consideran que se puede llevar a cabo una comunicación gris con críticas y ataques fuertes entre las partes que participan en un proceso electoral.
Creo que se debe regular con más dureza el uso de las redes sociales, ya que es un sector de opinión, debate y promoción política muy importante, pero que se presta a multiples agresiones que atenta contra la libertad de expresión y se llega a filtrar información poco veraz; que a final de cuentas provoca incertidumbre en el derecho electoral.
Hoy en día, las contiendas electorales tienden a ser muy cerradas, ya que todas las asociaciones políticas, candidatos independientes y coaliciones cuentan con una base de seguidores de acuerdo a su capacidad de negociación y representación en cada entidad federativa, generando un reto importante para las autoridades electorales de incluir y hacer participes a aquellos que no se identifican con propuestas e ideologías.
Pudiendo finalizar que, si vamos perfeccionando y regulando el uso de las nuevas tecnologías en materia de derecho electoral, se podrá abrir más el campo de participación en la sociedad en el que se garantice de manera eficiente la democracia del pais, resultando un trabajo de coordinación entre autoridades, ciudadanía y quienes contienden por cargos de representación popular.