Mucho se escucha sobre el Ingeniero Cuitláhuac Pérez Cerros, como uno de los empresarios más reconocidos en Aguascalientes, pero realmente poco se conoce sobre el padre ejemplar, la persona que es y lo que ha atravesado para llegar a ese alto peldaño. En Apolo hemos tenido la oportunidad de conocer sus pensamientos y opiniones por medio de sus artículos, pero ¿qué hay detrás de esas letras?.
Empresario, inversionista, emprendedor, conferencista, director, presidente y así puedo continuar con los títulos que rodean a Cuitláhuac, pero cambiemos de contexto para empezar a platicar sobre su labor como padre de familia y el balance que logra entre estar pendiente de sus hijas, de su trabajo y de él mismo.
Un caso de éxito siempre tiene una gran historia que hay detrás, lecciones de vida, errores y con todo ello la aceptación y el cambio positivo.
Con una infancia díficil y llena de carencias en una pequeña comunidad del municipio de Rincón de Romos, sus padres hacían su mejor esfuerzo para sacar adelante a sus cuatro hijos, guiándolos siempre por un buen camino de estudio y con la finalidad de que pudieran culminar una carrera. Hoy todos profesionistas; tres maestros igual que su padre y Cuitláhuac quien decidió un camino distinto, con una Ingeniería Mecánica.
Tuvo una niñez feliz, pues no sabía que había otra forma de vida sin carencias, hasta que acude a la secundaria en la cabecera municipal, pues la vida de sus compañeros era diferente, no vivían en calles de tierra o casas de rancho y fue donde se empezó a dar cuenta que se podía aspirar a algo más y a cuestionarse de ¿qué es lo que hacían esas personas, para tener una vida diferente?. Para cursar la preparatoria, se muda a la ciudad de Aguascalientes, donde detecta un parámetro aún más distinto a lo que había vivido y le llamaba la atención, que incluso algunos compañeros llegaban en carro propio, lo que hacía que creciera su curiosidad de saber como le hacían.
Esas inquietudes lo llevaron a tener mayores aspiraciones y sueños, por lo que al iniciar su carrera de ingeniería, se abrió camino solo, en un ramo en el que no tenía contactos ni conocidos.
Cuando egresó, tenía miedo de competir, sentía que iba a fallar. Por lo que en la oportunidad que tuvo para trabajar en General Motors en Silao, inició como becario, pues consideraba que era una responsabilidad donde no iba a figurar y donde no lo juzgarían, por lo que aprovechó para aprender lo más posible y así fue, duró 2 años en los que logró obtener cuatro puestos distintos, lo cual lo llevó a incrementar sus salarios y con ello sus responsabilidades.
Volvió a Aguascalientes para tomar un proyecto en Texas Instruments por dos años, empresa que le permitió crecer significativamente, gracias a los múltiples viajes que realizó a Estados Unidos y Canadá y donde su mayor responsabilidad era mover líneas de producción a Aguascalientes.
Después le ofrecen una gerencia de producción, en una campañía donde se fabricaban cajones de manejo de efectivo o mejor conocidas como cajas registradoras, ahí mismo obtiene el puesto Gerente Operativo seguido de uno como Director General.
Después tuvo tres intentos fallidos de crear negocios, e inmediatamenta surge una oportunidad de crear uno más en el sector industrial, al cual se aferró y lo hizo funcionar, es ahí donde vino una gran transición, pues empezó a crecer y crecer a una velocidad atípica para cualquier empresa. Desde el año 2006 hasta el 2019 han logrado mantener un promedio histórico del 24.7% anual, incluyendo sus 4 líneas de negocio: automotriz, comercio, tecnologías de la información y agroindustria.
La empresa y su crecimiento empezó a llamar la atención, lo que generó que lo voltearan a ver por muchos sectores y en otros países, empezaron a reconocerlo por todos lados, lo que sin darse cuenta lo lleva a crear un personaje ficticio y a perder piso, hasta que se topa con pared en un tema grave de salud, que lo obliga a tratarse de inmediato.
A partir de ahí cambió radicalmente su vida y se dio cuenta que debía ponerse más atención a él mismo y que el trabajo y su vida cotidiana lo hicieron perderse, así que le llegó el momento de valorarse a sí mismo y a su familia, la cual merecía además de tiempo, una mayor estabilidad.
Hace 3 años nació su hija menor, quien ha tenido varios problemas de salud, aunado a un sindrome de down. Esa pequeñita ha venido a darle a Cuitláhuac grandes aprendizajes, motivación, fortaleza y estabilidad.
Agrega que todas estas lecciones de vida, lo han ayudado a enfocarse en la parte espiritual, de alimentación, ejercicio y meditación pero sobre todo se ha dado cuenta, que primero se debe pensar en uno mismo, para poder disfrutar de lo más valioso, en este caso sus padres, sus hijas Chelsea, Vanessa, Sophie y su novia Gaby, así como también el resto de sus famliares y amigos, que aunado a ello lo ha llevado a manejar mucho mejor los negocios y a sus colaboradores.
