Por: Ing. Alberto Aldape
En muchas ocasiones hemos escuchado del término ‘responsabilidad social empresarial’, de hecho, hasta se entregan premios a empresas socialmente responsables, es en estos momentos cuando se debe demostrar verdaderamente esta responsabilidad social.
Muchas de las empresas, sobre todo aquellas relacionadas con los sectores comercio y servicios, están siendo afectadas por la contingencia sanitaria y, es precisamente ahora cuando se debe tener una actitud subsidiaria y solidaria con los colaboradores.
A través de propuestas innovadoras y creativas, los empresarios socialmente responsables deberán hacer un esfuerzo para mantener la plantilla laboral, ya que desafortunadamente muchos de los trabajadores de nuestro país no tienen capacidad de ahorro, y dejar de percibir su salario es una situación que profundizará su ya de por sí, precaria situación económica.
Si bien los tres niveles de gobierno deberán de implementar programas económicos emergentes para apoyar a las empresas y que estas cuenten con capital de trabajo suficiente, los dueños de las empresas deberán también de buscar privilegiar las compras de materias primas, productos y servicios relacionados con su actividad principal con proveedores locales. También en lo que se refiere a aquellas personas que están ocupadas pero que no cuentan con prestaciones sociales o un trabajo fijo, tales como jardineros, lava coches o quienes nos auxilian en las tareas domésticas, debemos de considerar mantener el gasto regular que veníamos haciendo y si fuera posible, adelantar una cantidad como pago de servicios futuros.
Esta pandemia está teniendo efectos no solamente en el sector salud, también nos está obligando a tener una nueva forma de convivencia social y, las repercusiones económicas pueden ser las más severas que hayamos vivido desde la Gran Depresión del siglo pasado, durante 1929 a 1930.
En estos momentos, es cuando se demuestra efectivamente la responsabilidad social empresarial para poder sortear de la mejor forma posible esta situación de ‘sana distancia’ y resguardo personal, lo más importante es preservar la vida y para esto debemos de ser disciplinados y cumplir con lo que dictamine o recomiende la autoridad sanitaria.
Debemos estar preparados y sentar las bases para que una vez transcurrida la fase de emergencia sanitaria, podamos recuperar la actividad económica que nos permita generar bienestar para la población. Seguramente se presentarán oportunidades y debemos aprovecharlas, los negocios tendrán nuevas formas y reglas de llevarse a cabo, este tiempo debemos tomarlo para ser mejores empresarios, contar con nuevas e innovadoras formas de hacer empresa y, sobre todo, entender que el centro de la economía es la persona, y que nuestras decisiones deben estar orientadas hacia el deber ser y el bien estar.
En Aguascalientes se deben diversificar los sectores económicos, generar nuevas empresas de base tecnológica que sean innovadoras y que satisfagan las nuevas necesidades del mercado, los empresarios deberán entender que es a través de la unidad y el trabajo en conjunto que podrán ser más competitivos, que se deberá aprovechar la oportunidad que ofrece la región Bajío-Centro Occidente, para de esta forma seguir siendo el ejemplo de crecimiento económico a nivel nacional y sobre todo alcanzar niveles de bienestar en la población a través de la adecuada distribución de la riqueza que se genere.
